Por medio del Decreto 469 del pasado 18 de noviembre, la Alcaldía de Bogotá realizó algunas precisiones relacionadas con los requisitos, acciones de mitigación y operación de las bodegas privadas de reciclaje de residuos sólidos no peligrosos no afectas al servicio público de aseo, así como el proceso de regularización. De acuerdo con la norma, dichas bodegas tendrán hasta el 31 de marzo del 2016 para culminar el plan de acción y cumplir con la normativa vigente en la materia. La Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (Uaesp) coordinará con las secretarías distritales de Planeación, Ambiente y Movilidad el acompañamiento técnico, cuando así se requiera, como parte del proceso de acciones afirmativas a la población recicladora de oficio. La disposición realiza modificaciones al Decreto 456 del 2010, por el cual se expiden normas urbanísticas y arquitectónicas para la implantación de instalaciones privadas de reciclaje.