La Procuraduría se opone a la persecución contra cualquier promotor y defensor de derechos, precisó la procuradora delegada para Familia, Infancia y Adolescencia, Ilva Miriam Hoyos, en su intervención ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, en la audiencia para analizar la situación de los defensores de derechos sexuales y reproductivos y de la población LGTBI.

La funcionaria destacó la vigilancia y el control al desarrollo de programas de salud sexual y reproductiva y el cumplimiento de la sentencia que despenalizó el aborto sin que, según dice, se le haya dado el carácter de derecho sexual a la interrupción voluntaria del embarazo.

Además, explicó que, después de un año de iniciado el proceso de implementación del Conpes 147 del 2012, relativo al embarazo adolescente, la entidad comenzó a vigilar el ejercicio del derecho a la salud sexual y reproductiva y las obligaciones asignadas a través de ese documento de política pública.

Hoyos precisó que la función disciplinaria de la Procuraduría recae únicamente sobre los servidores públicos y carece de competencia en materia penal o disciplinaria sobre los particulares, “lo que evidentemente hace imposible realizar hostigamientos o persecuciones a defensores de derechos humanos”.