Reparación por la esclavitud

Inglaterra, España, Francia, Portugal y Holanda tendrían que disculparse públicamente con los 15 países que conforman la Comunidad del Caribe (Caricom) y emprender acciones de reparación por los daños que les generaron con la esclavitud a la que los sometieron durante la época de la Colonia y el apartheid racial de un siglo que la remplazó.

El pasado 10 de marzo, los líderes de las naciones caribeñas aprobaron un plan de 10 puntos, elaborado con la asesoría de la firma de abogados inglesa Leigh Day & Co., para presentar una demanda ante la Corte Internacional de Justicia en la que reclamarán, además de las disculpas de los colonizadores, la cancelación de las deudas que algunos miembros de Caricom tienen con ellos e inversión para el desarrollo del Caribe, cuyo atraso atribuyen a esa época de sometimiento y genocidio.

Según informaron los abogados a la agencia de noticias Associated Press, el plan incluye la solicitud de reparaciones económicas por traumas sicológicos, ayudas para el fortalecimiento de los sistemas regionales de salud y educación e, incluso, el desarrollo de un programa de repatriación a África de miembros del movimiento Rastafari, que ansían el retorno a su tierra ancestral. El abogado Martyn Day considera que este es un conjunto razonable y justo de exigencias a los países que, como el suyo, se enriquecieron “a costa de las regiones a las que les fue robada su riqueza humana”.

El proceso de reclamación comenzó en julio del año pasado, durante la XXXIV cumbre de Caricom, en la que los mandatarios de la región acordaron establecer comisiones de reparación en cada uno de los 15 países y celebrar una reunión conjunta para definir la estrategia que se debía seguir. Como resultado de esto, se conformó la Comisión de Reparaciones del Caribe, que agrupa a abogados, académicos y economistas encargados de sustentar la demanda.

El año pasado, la presidente de la Comisión de Reparaciones de Jamaica, Verene Sheperd, le explicó al diario El País de España que la discusión se enmarcaba en temas de desarrollo, en particular, de acordar mecanismos de compensación que contribuyan al progreso de los Estados reclamantes. “Antes que nada, queremos que Europa se disculpe, pues hasta ahora han emitido declaraciones de arrepentimiento, pero ningún país se ha disculpado. Luego queremos infraestructuras para el desarrollo: escuelas, centros de salud, carreteras, hospitales. Y queremos que se acabe el racismo”, afirmó.

El primer ministro de San Vicente y las Granadinas, y presidente de Caricom, Ralph Gonsalves, informó que las partes en disputa tendrán una reunión en junio próximo para buscar una solución negociada, de cuyo resultado dependerá la presentación de la reclamación formal. “Creemos que tenemos a la ley y los acontecimientos de nuestro lado en relación al legado del genocidio de nativos y la esclavitud de africanos”, aseguró.

La tarea no es fácil. Hace unos años, Jamaica, Guyana y Antigua y Barbuda fracasaron en su intento de obtener una compensación por parte de las potencias europeas que implantaron políticas de esclavitud y extermino en sus territorios. La historia les da la razón. Habrá que ver si esta es suficiente para que la justicia internacional acceda a sus pretensiones.

(Fuentes: elpais.com, leighday.co.uk y caricom.org)