Anecdotario político
Anecdotario político
31 de Mayo de 2016
Reproducir
Nota:
15017
Imagen
Benjamín Ardila Duarte
- Después de la guerra, en 1945, se habló en Francia de la congestión de la justicia. Un periodista especializado propuso doblar el número de magistrados auxiliares (maître des requêtes) y otro dijo que era mejor establecer dos jornadas judiciales, 7 a.m. a 2 p.m. y 2 p.m. a 9 p.m. Algún caricaturista gracioso dijo que los magistrados y jueces deberían ganar por cada sentencia proferida.
- Clemenceau recordaba a sus interlocutores la condición del oportunista, así: “Unos 50 hombres públicos me asaltaban para pedirme un ministerio cuando fui designado jefe del Gobierno. Tenía entonces tantos amigos que no sabía dónde meterlos. Los grupos que me eran violentamente opuestos me mandaban enviados y representantes que ya me reconocían como su jefe. Tal oportunismo asombra y divierte”.
- Madame de Stael quería agradar y aconsejar a Napoleón, pero El Emperador desconfiaba de ella. La escritora, un día, en reunión privada, le preguntó a Bonaparte si amaba a las mujeres, y el gran soldado le respondió: “Yo amo a la mía”. La escritora entró enseguida a la oposición política, por intermedio de Benjamín Constant, y con su libro Corina.
- El economista Keynes combatió la política de altos precios y bajos salarios. Ya entonces se decía que los precios suben por el ascensor y los salarios por la escalera. El presidente Alfonso López Pumarejo expresó que en Colombia todo es caro y que lo único barato es el salario. Con la lúcida cabeza fría ellos entendían que no puede haber desarrollo económico y crecimiento industrial, sin una amplia demanda interior agregada.
Opina, Comenta