El revisor fiscal debe contar con documentación de auditoría que sirva como evidencia de que su trabajo fue planificado y ejecutado conforme al marco de aseguramiento vigente en Colombia, en los casos que aplique, las Normas Internacionales de Auditoría (NIA).

Referente a la documentación de auditoría, la NIA 230, entre otros requisitos, establece:

— La documentación registra los procedimientos aplicados, la evidencia obtenida y las conclusiones alcanzadas.

— Su propósito es respaldar el informe de auditoría y demostrar el cumplimiento de las NIA y demás requisitos legales.

En adición a lo anterior, la Ley 43 de 1990 establece que los papeles de trabajo son propiedad exclusiva del contador público que actúa en calidad de revisor fiscal,  en ellos deja constancia de las labores realizadas que le permitieron emitir su opinión.

Si la entidad auditada no le suministra la información solicitada o la suministra de forma incompleta o extemporáneamente  puede limitar el alcance de la auditoría y, en consecuencia, el profesional podría calificar la opinión o dictamen.

Este tema ha sido motivo de consulta ante el Consejo Técnico de Contaduría Pública (CTCP), quién se pronunció en los conceptos 250 y 356 del 2024, los cuales se pueden consultar en el módulo DOCTRINA NAI Y DE LA PROFESIÓN CONTABLE de la obra NAI INTEGRAL Y DE LA PROFESIÓN CONTABLE.

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