Según lo manifestó la Corte Constitucional, la decisión favorable de habeas corpus es inimpugnable, ni procede algún mecanismo judicial, tal como lo estableció el legislador y lo avaló el alto tribunal. Sin embargo, ello admite una excepción, pues puede presentarse la acción de tutela cuando se evidencien actuaciones judiciales manifiestamente irrazonables o fraudulentas. Por otro lado, y en contraposición, es procedente la acción en contra de decisiones que nieguen la protección a la libertad individual. Por último, el tribunal constitucional recordó que el proceso de habeas corpus no es adversarial, es decir que no se trata de un litigio, toda vez que es un examen que realiza el juez para determinar si el recluso se encuentra ilegalmente privado de su libertad (M. P. Carlos Bernal).