El presidente Iván Duque solicitó a la Corte Suprema de Justicia la ratificación de la declaratoria como crímenes de lesa humanidad e imprescriptibles de los homicidios del líder político Álvaro Gómez Hurtado y su asistente José del Cristo Huertas Hastamorir, ocurridos el 2 de noviembre de 1995. El jefe de Estado hizo la petición a través de una carta enviada a José Luis Barceló. En la misiva, el mandatario recordó que la Fiscalía General de la Nación, tras varios años de investigación y en respuesta a diversas solicitudes de las víctimas, concluyó que los homicidios de estas dos personas constituyen crímenes de lesa humanidad, pues se enmarcaron dentro de un plan sistemático “promovido por narcotraficantes para eliminar a sus opositores y a líderes sociales, e intimidar a la población en el marco del conocido escándalo del proceso 8.000”, En la carta, el Presidente expone los casos de Luis Carlos Galán y del periodista Guillermo Cano Isaza, a los cuales las autoridades judiciales colombianas han conferido la categoría de crímenes de lesa humanidad para efectos de volverlos imprescriptibles, precedentes que resultan aplicables a estos homicidios.