La Corte Constitucional reiteró que aunque la tutela tiene el carácter de medio subsidiario, puede usarse para reclamar acreencias laborales si se demuestra que por la ausencia de pago se vulnera un derecho fundamental o que los mecanismos existentes no son eficaces ni idóneos, o que se puede dar un perjuicio irremediable. Señaló además que cuando están comprometidos los derechos fundamentales de personas objeto de especial protección constitucional, la valoración de los requisitos de procedencia de la tutela, relacionados con el agotamiento de los recursos y medios judiciales ordinarios y la configuración de un perjuicio irremediable, se hace más flexible. El pronunciamiento lo hizo la Sala Tercera de Revisión al amparar el derecho al mínimo vital de una mujer y sus dos hijos menores de edad que pedían el pago de los salarios de su esposo y padre perteneciente a la Policía Nacional y quien sufrió un accidente durante un operativo que lo dejó con una incapacidad que requiere cuidado permanente (M. P. Luis Ernesto Vargas).