Marco Jurídico para la Paz pasa a conciliación en el Congreso

La plenaria del Senado aprobó  ayer, en último debate, el acto legislativo que establece instrumentos jurídicos de justicia transicional.

El proyecto, que se someterá a conciliación el próximo martes, pasó de tener un solo artículo, a cinco, en su segunda vuelta en el Congreso.

Numerosos  cambios ha sufrido la iniciativa, que ha generado polémica en diversos sectores. Aunque el Polo Democrático se retiró de la discusión, esto no fue impedimento para que, con  65 votos a favor y 3 en contra, se le diera aprobación.

El ministro del Interior, Federico Renjifo, felicitó al Congreso de la República por la aprobación de la iniciativa, y sostuvo que es una  “herramienta idónea para consolidar la paz”. “El Marco de Justicia Transicional no es un marco para la impunidad y quiero ratificarle a ustedes que así será. Hay que insistir en que es la mejor manera de reparar a las víctimas”, añadió.

Lo que se conciliará

-          El tratamiento diferenciado para los grupos armados ilegales que hayan sido parte en el conflicto interno, pues, en último debate, se incluyó a los miembros de la fuerza pública.

-          El parágrafo que determina la creación de una comisión de la verdad al término del conflicto armado, que se reglamentaría por una ley estatutaria.

-          Los criterios de priorización y selección de casos, que deberán tener en cuenta su gravedad y representatividad.

-          El parágrafo según el cual, para acogerse a los instrumentos de justicia transicional, los grupos al margen de la ley deberán terminar el conflicto armado, dejar las armas, reconocer su responsabilidad y reparar a sus víctimas.

-          La integración de un  nuevo artículo transitorio en la Constitución Política, el 67, que determina cuáles serán los delitos considerados conexos al delito político, y que les permitiría a los desmovilizados participar en política.

-          Un nuevo artículo de acuerdo con el cual los recursos del tesoro público que se liberen como consecuencia de la reducción de los gastos militares, ante eventuales acuerdos de paz, serían destinados a inversiones sociales.