Presidente anuncia ley de tierras y pide respaldo a proyecto de sostenibilidad fiscal

El presidente de la República, Juan Manuel Santos, anunció la presentación de un proyecto de ley general de tierras y desarrollo rural en el transcurso del año.

La iniciativa busca delimitar y desarrollar la frontera agrícola del país, sin que se afecte la sostenibilidad ambiental. Además pretende mantener las grandes reservas forestales y reducir la deforestación.

“Tenemos el urgente desafío de optimizar la tierra para que la agricultura sea una locomotora que jalone el crecimiento económico”, afirmó Santos, durante el foro Pensar en verde: estrategia económica para el siglo XXI, que se cumplió el pasado miércoles en Bogotá.

Según el mandatario, la ganadería colombiana utiliza 38 millones de hectáreas, a pesar de que solo 20 millones están en condiciones para la explotación ganadera. A eso se suma que, en el país, solo cinco millones de hectáreas cuentan con pastos mejorados para la alimentación de animales.

Algunos desarrollos agrícolas, agregó, tan solo usan cinco millones de hectáreas para la producción de alimentos, a pesar de tener la posibilidad de extenderse a 21 millones de hectáreas.

Santos aseguró que uno de los principales compromisos de su gobierno es garantizar el buen uso de la tierra y el agua. Por eso, anunció la creación de la Unidad Nacional de Tierras y Aguas, adscrita al Ministerio de Agricultura, que se encargará de reglamentar el uso de estos recursos.

Sostenibilidad fiscal

De otro lado, el presidente invitó al Partido Liberal a hacer una reflexión sobre la importancia del proyecto de sostenibilidad fiscal que hace trámite en el Congreso.

Durante una reunión con la bancada de esa colectividad, afirmó que, respetando los principios del partido y los propósitos de la reforma, puede abrirse paso un acuerdo para sacar adelante la iniciativa.

“Invito a que nos sentemos a reflexionar sobre ese tema. Yo creo que nos podemos poner de acuerdo en alguna redacción que no vaya a ir en contra de los principios que ustedes están defendiendo en materia constitucional, pero que al mismo tiempo nos permita tener una garantía de mantener una moneda sana que a todos nos sirve”, explicó.

Santos afirmó que no hay impuesto más regresivo que una moneda que pierda su capacidad adquisitiva, porque, generalmente, cuando hay una inflación alta, quienes pierden poder adquisitivo son los pobres, que únicamente reciben ingresos, y quienes lo ganan son los ricos, que, además, tienen activos.

 “En otras partes del mundo han adoptado una política social, muy progresista, que es defender la moneda sana. ¿Por qué? Porque el desbalance fiscal, la insostenibilidad fiscal, inmediatamente produce más pobreza”, concluyó.