En reciente debate de control político, un concejal de Bogotá manifestó su inconformidad con el trabajo de la administración distrital para la elaboración de políticas que incentiven la productividad y competitividad en la ciudad. Según el cabildante, no se han hecho los esfuerzos necesarios para que los índices de seguridad, movilidad, empleo, buen gobierno, entre otros, mejoren y generen garantías a los comerciantes, empresarios e inversionistas. Así mismo, manifestó su preocupación por la migración de grandes fábricas a municipios aledaños para reducir gastos impositivos, pues la ciudad ha dejado de percibir cerca de $ 7.000 millones.