La resolución de clasificación arancelaria de un bien o servicio es un acto general, sin importar si se expidió de oficio o a solicitud de parte, reiteró la Sección Cuarta del Consejo de Estado.

Esos actos, indicó la corporación, tienen como objeto especificar la subpartida arancelaria de la nomenclatura del sistema integrado en la que clasifican las mercancías objeto de comercio exterior, lo cual afecta la política comercial de los países.

Por eso, la resolución no tiene un carácter particular, aunque alguien pueda beneficiarse o perjudicarse con dicha clasificación, aclaró.

El alto tribunal precisó que la demanda de nulidad contra ese acto puede presentarse en cualquier tiempo y su declaratoria no genera el restablecimiento del derecho.

(Consejo de Estado, Sección Cuarta, Sentencia 11001032700020090002700 (17742), jun. 25/12, C. P. Martha Teresa Briceño)