Se deberá limitar la suscripción de nuevos contratos de arrendamiento de bienes inmuebles a aquellos que sean indispensables para el funcionamiento del servicio público y la realización de sus actividades, puntualiza una reciente Directiva Presidencial, la cual imparte instrucciones en el marco del Plan de austeridad del gasto 2021. Para nuevos contratos o ampliación del plazo de los vigentes, se debe considerar una evaluación que permita determinar la necesidad del contrato o su ampliación, de acuerdo con el funcionamiento y operación de las áreas de cada entidad. Así mismo, como buena práctica contractual, las entidades deben adelantar las coordinaciones pertinentes a fin de suscribir contratos de comodato entre las mimas, cuando a ello haya lugar, y que puedan sustituir la necesidad de suscribir contratos con particulares. Los contratos y medidas que se adopten en cumplimiento de la nueva directiva deberán ser reportados semestralmente al Departamento Administrativo de la Presidencia.

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