Los cargos ocupados en propiedad pueden someterse a concursos de méritos, indicó la Sección Segunda del Consejo de Estado.

De acuerdo con el alto tribunal, por un lado, está el interés particular de conservar el cargo; por el otro, el interés general de vincular al Estado a las personas más capacitadas para desempeñarlo. En este balance, el interés público prima sobre el particular.

Al aplicar esta regla al caso analizado, el Consejo avaló el concurso que se convocó en el 2006 para proveer cargos de notario ocupados tanto en propiedad como en provisionalidad.

Sin embargo, la Sección precisó que la convocatoria al concurso no le hace perder su cargo de carrera a la persona nombrada en propiedad. Po lo tanto, el ganador debe ser ubicado en un empleo de condiciones similares para el que concursó.

De este modo, se protegen por igual los intereses en pugna, concluyó la corporación.

(C. E., Secc. Segunda, Sent. 01302007, abr. 26/11, C. P. Bertha Lucía Ramírez)