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¿Dopaje equino en Colombia o alimentos contaminados?
30 de Octubre de 2015
César Giraldo
Socio en GHER & Asociados Abogados
Twitter: @gher_asociados
En los últimos días, los jinetes colombianos andan preocupados por una situación que se ha venido presentando en las competiciones nacionales e internacionales de equinos por el alto índice de caballos dopados, en especial por encontrarse dentro de sus cuerpos cafeína y teofilina, sustancias prohibidas por la Federación Ecuestre Internacional (FEI).
La cafeína y la teofilina hacen parte del grupo de medicamentos controlados por la FEI, es decir están avalados siempre y cuando el consumo de estos sea informado previamente al evento donde el caballo participe. En caso contrario, de acuerdo con el artículo 2.1.1. del “Equine Controlled Medication Rules”, se entenderá como dopaje y el jinete y su equipo deberán responder por la infracción.
Para este tipo de infracciones, la regulación ordena la descalificación del evento donde haya participado el caballo, así como multas que ascienden hasta 15.000 francos suizos y periodos de inelegibilidad, es decir que el jinete y el caballo no pueden participar de actividades relacionadas con el mundo equino por determinado tiempo, el cual para este tipo de casos, según el artículo 10.2.1., es de hasta dos años.
En Colombia, desde el 2009, aproximadamente, se han encontrado bastantes casos de cafeína y teofilina. De acuerdo con una investigación periodística realizada por El Espectador, en la IX Exposición mundial equina Confepaso 2009, celebrada en Pereira, 43 caballos de los 900 inscritos se les encontró cafeína y teofilina, sin duda alguna un número bastante alto para este tipo de competiciones.
Así mismo, en otras investigaciones realizadas por el portal de internet las 2 orillas, se estableció que, en Colombia, se han sancionado hasta 26 caballos en un mes por encontrar cafeína y teofilina en sus cuerpos, números que realmente preocupan más aún cuando los sancionados son los mejores jinetes del país.
Al parecer, en Colombia, el problema radica en que la alimentación brindada a los caballos está contaminada por cafeína y teofilina. Un estudio realizado por el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) y Fedequinas del pasado 20 de octubre señaló que en Colombia, en los productos comerciales de alimentación para caballos (alfalfa, heno y concentrados) se encuentra cafeína y teobrimina, la cual, para mayor entendimiento, es un alcaloide de la familia de las metilxantinas, familia que incluye también a la teofilina y la cafeína.
Siendo así las cosas, y de acuerdo con el artículo 10.5.1 de la regulación, puede existir un eximente de culpa o negligencia significante por parte del jinete para este tipo de casos, ya que la misma establece una excepción en casos de productos contaminados, donde puede existir la opción de eliminar la sanción impuesta, tal y como pasa en nuestro país.
Aparte de esto, hay situaciones que empeoran la situación cuando un jinete quiere demostrar su inocencia ante los tribunales disciplinarios. En Colombia es prácticamente imposible encontrar laboratorios que hagan análisis de teofilina en los productos comerciales que se les dan a los caballos, toda vez que estos, al parecer, no cuentan con la tecnología necesaria para hacer el estudio. Así mismo, en Sudamérica no existen laboratorios aprobados por la FEI, lo que dificulta aún más la defensa en términos científicos.
Adicionalmente, la regulación le da la oportunidad al jinete de realizar una segunda apertura de la toma de la prueba antidopaje hecha al caballo, sin embargo, y como pasa con los atletas, el costo de esta apertura es bastante alto, por lo que en la mayoría de casos se renuncia a esta.
Así, y para evitar que las sanciones por dopaje en equinos siga creciendo en nuestro país por la contaminación de productos, es importante que organismos como la Federación Ecuestre Colombiana y Fedequinas se percaten del tema y empiecen a tomar medidas que favorezcan a los jinetes para este tipo de casos. En el medio se rumora que la alfalfa (la cual está contaminada con cafeína) no tiene registro Invima y que muchos de los concentrados que en la actualidad se comercializan en Colombia cuentan con este como componente dentro de sus ingredientes, lo que seguramente arrojará resultados positivos por parte de los caballos. Sin duda, el tema es alarmante, más aún cuando los jinetes y caballos sancionados son los mejores representantes del país en las competencias nacionales e internacionales.
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