General - ESPECIAL DÍA DEL ABOGADO
Las perspectivas y los retos del abogado de hoy
22 de Junio de 2016
Con ocasión del Día del Abogado, Legis realizó el foro La formación del abogado hoy: perspectivas y retos, en el que se escucharon diferentes posiciones de varios magistrados, decanos de facultades de Derecho y abogados litigantes sobre la actualidad y el futuro de la profesión. Al evento también asistieron representantes del Gobierno Nacional, entre ellos, el Viceministro para la Promoción de la Justicia, Arleys Cuesta Simanca.
En el encuentro se trataron temas importantes tanto para el litigante, como para el operador judicial, así como el papel de las facultades de Derecho en la formación del abogado, los desafíos de la administración de justicia, la calidad en la preparación de estos profesionales y los retos en la práctica del ejercicio profesional, entre otros.
Laura Victoria García Matamoros, miembro de la Comisión Nacional Intersectorial de Aseguramiento de la Calidad de Educación Superior, inició su intervención explicando el papel de las facultades de Derecho en la formación del abogado y las políticas que se están implementando para mejorar la información. Igualmente, indicó la importancia de combinar el Derecho a la educación con el compromiso profesional del docente.
El magistrado del Consejo de Estado Germán Bula Escobar afirmó, con base en el alto número de profesionales del Derecho que existen y que diariamente se gradúan de las facultades del país, que es urgente disminuir la producción de juristas, elevando las exigencias de las universidades. Explicó también que la educación se ha convertido en un negocio, por lo que los estudiantes deben estudiar en la universidad que pueden y no en la que quieren, razón por la cual existen excelentes abogados de universidades no acreditadas.
Iván Darío Gómez Lee, exmagistrado de la Sala Administrativa del Consejo Superior de la Judicatura y exauditor general de la Republica, expuso las capacidades que deben tener los jueces de la República y que su formación debe efectuarse con compromiso social, puesto que estos ostentan un papel protagónico y son los líderes de su despacho.
Para Arleys Cuesta Simanca, viceministro para la Promoción de la Justicia, es preciso implantar un mecanismo para que todos los estudiantes de Derecho, desde los primeros semestres, contribuyan, practiquen y, en general, hagan parte de los consultorios jurídicos, no agenciando intereses, pero sí conociendo diferentes aspectos comunitarios. Igualmente, aseguró que los retos son grandes para el abogado, para la universidad, para la familia y, finalmente, para el individuo. Por eso, un mejor abogado depende de un mejor individuo.
Según Juan Fernando Córdoba, decano de la facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de la Sabana, es transcendental la ayuda de las plataformas de las tecnologías y las comunicaciones no solo en las carreras de Derecho, sino para todas las profesiones. También, cree fundamental la necesidad de educar a los docentes para que adquieran una formación como profesores, “enseñarles a enseñar”.
En opinión del abogado litigante y asesor de varias entidades públicas y privadas Henry Sanabria Santos, el primer reto del abogado es estudiar constantemente y estar actualizado, toda vez que quien no está pendiente de la jurisprudencia, de los proyectos de ley y de los cambios normativos, no puede ejercer la profesión.
¿Cuáles son las necesidades de formación de los abogados litigantes? A esta pregunta, Édgar Munévar Arciniegas, abogado especialista en Derecho Comercial y Derecho de Seguros, explicó que el abogado debe ser un líder para comunicarse con su equipo de trabajo, esto es, con el juez, con sus clientes. También aseguró que el jurista no solo debe conocer normas, sino que debe entender sentimientos y preocupaciones del cliente y estar al tanto de la tecnología.
Finalmente, Francisco Bernate, abogado penalista y conjuez de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia, indicó que se debe generar una cultura de ética y respeto por la profesión de abogado, así como también de la cultura de la legalidad.
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