La Corte Suprema de Justicia absolvió al senador Honorio Galvis Aguilar, acusado del delito de prevaricato por acción, por supuestas irregularidades en la expedición de actos administrativos de expropiación de algunos predios de la ciudad de Bucaramanga destinados para la construcción del acueducto de la localidad. Según la Sala Penal, Galvis Aguilar actuó bajo la influencia de un error, pues creyó que su actuación, avalada por quien ostentaba el cargo de jefe jurídico de la alcaldía, estaba ajustada a la ley. El funcionario expidió la resolución sin el consentimiento del Concejo Municipal de Bucaramanga y posteriormente, cuando se percató de la omisión, quiso remediarlo mediante otro acto administrativo. La Corte señaló que aunque no se saneó la irregularidad, la decisión se ampara en la denominada infracción imprudente, que le resta uno de los elementos fundamentales, la tipicidad culposa, al delito de prevaricato, por lo que procede la absolución (M. P. Augusto Ibáñez).