Fue temporal y excepcional la medida que ordenaba que los jueces de orden público percibieran la misma remuneración de los magistrados de tribunal de distrito judicial (3:37 p.m.)

El estado de sitio declarado por el Decreto 1038 de 1984 tuvo como origen los altos índices de violencia que presentaba el país en ese momento, señaló el Consejo de Estado. Por ello, para investigar los reiterados delitos se creó una jurisdicción especial, dentro de la cual se encontraban los jueces especializados y los jueces de orden público. Estas medidas transitorias fueron terminadas con la Constitución de 1991, pero en ella se facultó al Gobierno para adoptar como legislación permanente las normas dictadas durante ese estado de sitio. En esa medida, en el Decreto 2271 de 1991 se acogió como legislación permanente la disposición que señalaba a los jueces de orden público con el derecho a percibir la misma remuneración de un magistrado de tribunal superior de distrito judicial. Sin embargo, como en ese mismo decreto la jurisdicción especial fue integrada con la jurisdicción ordinaria, los beneficios salariales y prestacionales que tenían los jueces de orden público se terminaron, además, porque se trataba de una medida temporal y excepcional, aclaró el alto tribunal (C.P. Víctor Hernando Alvarado Ardila).